Neeleshwar Hermitage

La habitación era bien grande, con la cama en el medio y el baño estaba al aire libre. Todo perfectamente limpio y en un entorno natural muy bonito. Cada habitación tenía un nombre y de noche no era fácil encontrarlas porque estaban bien separadas unas de otras. No había muchas habitaciones y eso lo hacía más especial. Pero lo mejor de todo era el desayuno a la carta en la playa y la increíble vista de la enorme pileta del hotel.

Hermoso hotel al lado de la playa, que hace que tu desayuno a pocos metros de ella sea un placer absoluto. Las habitaciones son espectaculares, son bungalow súper espaciosos, decorados de una manera hermosa, y hasta el baño tiene detalles muy bonitos. ¡Un sueño! Algunas habitaciones también cuentan con piscina privada... Y hablando de piscinas, la enorme piscina con la que cuenta este hotel es una maravilla, rodeada de palmeras que no querrás abandonarla ni para ir a comer. ¡Regresaría una y mil veces!